Las tenemos para todos los gustos, sin embargo, a la hora de elegirlas
no solo debemos fijarnos en que nos queden bien. Hay tener muy en cuenta
otros aspectos importantes.
En los últimos años, las gafas de sol se han convertido en un
complemento de moda imprescindible. Cada temporada, las diferentes
marcas lanzan nuevas colecciones con diseños innovadores para atraer a
los clientes. Pero, ¿sabemos elegir las más adecuadas para nuestros
ojos?
¿En qué fijarse?
Aunque la función
principal de las gafas de sol no es adornar, la mayoría de las personas
eligen modelo basándose en una cuestión puramente estética, obviando la
calidad y características de las lentes. Según los datos recogidos por
el Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas, una de cada tres gafas de
sol vendidas en España no superan los controles sanitarios necesarios, a
pesar de que pueden dañar severamente la visión. Afecciones como
queratoconjuntivitis, queratitis o cataratas prematuras pueden venir
provocadas por la utilización de este tipo de gafas. De hecho, estas
patologías, junto con las infecciones oculares típicas incrementan en
torno a un 20% durante este periodo.
Las gafas de sol que se venden
de forma ilegal y en establecimiento no autorizados, no llevan lentes
con filtros de protección solar adecuados, de ahí que sean el
desencadenante de estos problemas. Para evitarlos, a la hora de hacer
nuestra compra, es fundamental que nos aseguremos de que las lentes
cuenten con filtros especiales que impidan que lleguen al ojo las
radiaciones dañinas, como el infrarrojo y el ultravioleta, y reduzcan la
intensidad de las radiaciones visibles.
Solo las gafas que se venden
en establecimiento sanitarios de óptica, cumplen con los controles de
calidad necesarios que nos aseguran la salud de nuestros ojos.
¿Cómo elegirlas?
No
hay porqué renunciar a la moda por la calidad, pero sí se deben tener
en cuenta una serie de aspectos para no equivocarnos a la hora de
adquirir unas gafas de sol. Los especialistas son quienes mejor nos
pueden asesorar, ellos se basan en:
• Cuándo se van a utilizar: no
son iguales unas gafas que vamos a usar para correr que las que vamos a
llevar a la playa. Debes saber en qué momentos las vas a usar para que
la protección de la lente sea la adecuada.
• El filtro de protección:
hay que asegurarse de cual es el que lleva nuestras gafas. El filtro
solar debe protegernos completamente de la radiación ultravioleta (UV).
•
La calidad de las lentes: las que no cumplen los certificados de
calidad dejan pasar la radiación solar, independientemente de que sean
oscuras.
• La calidad de la montura: las más apropiadas son las que
cubren los laterales de los ojos porque evitan que entre la radiación
solar. Con unas gafas pequeñas, los párpados quedan muy al descubierto
ante la radiación nociva.
• Si han sido sometidos a alguna operación
ocular: estas personas deben tener un cuidado especial. Por ejemplo,
quien ha sido operado de cataratas debe proteger el interior del ojo,
antes preservado por el cristalino.
Fuente: www.cnoo.es